viernes, 6 de abril de 2007

Los reinos olvidados



Abro al azar La soledad sonora, de Emily Dickinson, y leo:


605
La araña una pelota plateada sujeta
en sus imperceptibles manos

y sobre sí danzando suavemente

desovilla su hilado hecho de perlas.


Se aplica, andando en nada,

en invisible oficio.

Sobre nuestro tapiz ella hace el suyo

en la mitad del tiempo.


Majestuosos, traza en una hora

continentes de luz.
Penden de las escobas de las amas de casa

como olvidados reinos.


* * * * *









Dickinson, Emily: La soledad sonora
Selección, prólogo y versión de Lorenzo Oliván
Colección LA CRUZ DEL SURValencia, 2001Editorial Pre-textos






Fotografías:
1) Argiupe aurenti, de Patrick Edwin Moran.
2) Dewy spider web, de Peter "Fir0002".
3) Último retrato de Emily Dickinson, ya vestida de blanco, imagen de autor desconocido y de dominio público (Wikipedia).

3 comentarios:

Osselin dijo...

Poderosa mirada. saludos.

Anónimo dijo...

Extraño poema, muy intenso. No habia leído nada de Dickinson. Reinos olvidados que se deshacen en escobas que limpian rincones, es muy fuerte.
Gracias por descubrírmela.
Abrazos.

maite dijo...

me ha costado leerlo, también lo encuentro extraño...
besos

Antonio Gómez Ribelles: 'Las lagartijas guardan los teatros' (La Estética del Fracaso, Cartagena, 2021)

  La arqueología de la memoria Aquel largo pasillo desemboca  en una habitación igual a tantas  que no existen [Manuel Padorno] También hici...